miércoles, 26 de noviembre de 2008

Otro de tregua

Recuerdas que hace diez años la neblina se tropezaba con nuestros pasos? Nos fuimos a tomar un café al ecléctico, escuchamos música y platicamos, por horas platicamos. Recuerdo que traías una camisa mostaza y una chamarra verde, (Esa que años después tirarías a la basura) recuerdas como me dolió que te deshicieras de ella?

Hoy amanecí con la memoria embarrada en las manos. No quise tocar nada, tuve que utilizar brazos y codos para vestirme, no pude ni siquiera mirarlas de reojo, sabía que la memoria estaba ahí, y que dificilmente se iría. De súbito aparecieron esos días fantasma.

Son diez años, me dije, antes de salir de casa y tomar el taxi.

Al llegar al centro, me paré en un puesto de bufandas, mis manos automáticamente se escondieron. Preferí no hacerles caso, no mirarlas. Pobres, ahora descansan bajo un par de guantes.

Ni modo, son diez años.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Mi edad mejor: pasar por un año, dos veces diez años. Es la mejor. Me gusta tu blogggg. saludos!